En el caso de que un perro quede atascado, se recomienda que el dueño abra la boca del perro y verifique si la posición donde está atascado el objeto extraño es claramente visible. Si la posición es poco profunda y se puede ver directamente, el propietario puede intentar utilizar una herramienta para retirar el objeto extraño. Sácalo, también puedes levantar al perro boca abajo y luego darle palmaditas en la espalda. Si el objeto extraño está profundamente atascado, debes llevar al perro al hospital de mascotas de inmediato. Después de informarle al médico sobre la condición del perro, este realizará un examen de rayos X para verificar la ubicación del objeto extraño y luego utilizará el método de tratamiento más eficaz.
1. La posición atascada es superficial
1. Si lo que está atrapado en la garganta del perro es pequeño y está a una profundidad que el dueño puede ver. El dueño puede primero lubricar la garganta del perro y luego usar palillos, pinzas u otras herramientas para quitar las cosas atascadas en la garganta. Sin embargo, debe prestar atención a la seguridad al sujetar para evitar que el perro lo lastime accidentalmente y tener cuidado de no rayar la mucosa esofágica del perro.
2. El dueño también puede intentar levantar al perro boca abajo y darle unas palmaditas fuertes en el lomo. Esta estimulación puede inducir al perro a vomitar y expulsar la materia extraña. Si se descarga con éxito, se debe dar una pequeña cantidad de agua a tiempo para lubricar los intestinos y la boca, y se debe volver a alimentar con este tipo de alimento más tarde. Si no se puede dar de alta, debe acudir inmediatamente al hospital de mascotas para recibir tratamiento para evitar que entre accidentalmente en la tráquea y provoque asfixia.
2. La posición atascada es profunda
Si lo que está atascado en la garganta del perro es más grande, o laLa posición atascada es más profunda, el dueño debe llevar al perro al hospital de mascotas para fotografiarlo a tiempo. Se toman radiografías para determinar la posición del hueso y luego se extirpa quirúrgicamente o directamente a través de un endoscopio.
Nota: Por lo general, los propietarios no deben alimentar a sus perros con huesos con puntas afiladas, como huesos de pollo, pato y otras aves, huesos de pescado, etc. Se recomienda alimentar con carne directamente. .