El gatito recién criado sigue maullando sin parar. Puede ser porque el gatito acaba de llegar a un ambiente extraño y se siente asustado e intranquilo, por lo que sigue maullando. En segundo lugar, puede ser porque el gatito lleva mucho tiempo sin comer y siente hambre y sed, por lo que sigue ladrando con ansiedad. Además, si un gatito está enfermo o no se siente bien, seguirá ladrando. Se recomienda que los dueños presten más atención para observar si el gato presenta otros síntomas anormales, como apatía, pérdida de apetito, diarrea, vómitos, etc. Si se encuentra alguna anomalía, busque atención médica a tiempo.
1. Miedo
Los gatitos recién criados se sienten muy asustados porque no están acostumbrados al entorno desconocido.ambiente, por lo que seguirán ladrando. Algunos gatos también pueden tener reacciones de estrés. Provocando falta de apetito mental, somnolencia, miedo a la vida, etc. En este momento, se recomienda que el dueño intente no estimular al gatito, pero puede prepararle un ambiente tranquilo y ponerle comida y agua. El gatito mejorará después de que se adapte al medio ambiente. Además, si hay otras mascotas en casa, lo mejor es aislarlas un tiempo los primeros días para que tengan tiempo de adaptarse.
2. Hambre
Si el gatito maúlla con mucha urgencia, sobre todo si lleva mucho tiempo sin comer, es probable que tenga hambre o sed. En este caso, el dueño debe preparar suficiente comida y agua para el gatito a tiempo y colocarlos dentro del rango de actividades del gato, de modo que el gato coma solo y, naturalmente, deje de ladrar cuando esté lleno.
3. Malestar físico
Si el maullido del gatito es doloroso y se acompaña de apatía, pérdida de apetito, diadiarrea, vómitos, etc., puede deberse a malestar físico. Cómodo y siguió gritando. Si el dueño descubre que el gato tiene una anomalía, se recomienda llevarlo al hospital de mascotas para que lo examinen y traten a tiempo para evitar retrasar la afección.