Un gato que se revuelca en el suelo puede estar actuando de manera coqueta, o puede deberse a picazón o estar en celo. Se recomienda que el dueño le quite el pelo al gato y lo revise. Si no hay ninguna anomalía en la piel del gato, puede ser una reacción de comportamiento fisiológico normal y el dueño no necesita preocuparse demasiado. Sin embargo, si observas que tu gato presenta síntomas como enrojecimiento de la piel, caspa, costras y caída del pelo, debes considerar que el gato tiene pulgas, piojos y otros parásitos en su cuerpo o tiene alguna enfermedad de la piel. Se mueve hacia adelante y hacia atrás debido a la picazón y debe consultarse de inmediato con su veterinario para obtener medicamentos.
1. Estro
Cuando los gatos están en estro, especialmente las hembrasLos gatos, rodarán por el suelo, se frotarán contra la pared, dejando su propio olor por todas partes, y también aparecerá el fenómeno de ladrar y sacar el trasero todo el tiempo. Generalmente, esta situación mejorará después del período de celo de la gata, que dura aproximadamente medio mes. Si el dueño no quiere que el gato vuelva a tener esta situación, también puede considerar llevar al gato a un hospital de mascotas para una cirugía de esterilización en un período de celo escalonado.
2. Picazón en el cuerpo
Si notas que el gato no sólo rueda por el suelo y se frota por todos lados, sino que también se rasca con las manos. También se acompaña de síntomas como enrojecimiento de la piel, hinchazón, caspa y costras. Entonces hay que tener en cuenta que el gato tiene parásitos o una enfermedad de la piel. Como el gato tiene picazón, rodará por el suelo. Los dueños pueden quitarle el pelo al gato para comprobarlo. Si se encuentra alguna anomalía en la piel, se debe consultar a un médico de mascotas para recibir medicación y tratamiento a tiempo.
3. Interinocoquetamente
Cuando a un gato le gusta mucho su dueño, expondrá su barriga al dueño en el suelo y rodará, esperando que el dueño juegue con él. Si este es el caso, significa que el gato confía en ti y dejará al descubierto su barriga. En este momento, el dueño puede aprovechar esta oportunidad para interactuar más con el gato, como abrazarlo, acariciarlo, rascarle la barbilla y tocarlo. La cabeza del gato y otros movimientos no solo obtendrán una respuesta a la coquetería del gato, sino que también aumentarán los sentimientos entre ellos.