Puede juzgar que un gato ha salido del celo observando su estado mental, apetito, comportamiento y apariencia. Los gatos generalmente entran en celo entre los 6 y 8 meses de edad. Durante el celo suelen gritar y orinar por todas partes, y los gritos continúan por la noche. Durante este período, el cuerpo del gato secretará hormonas. Los cambios pueden provocar mal genio e incluso afectar la alimentación y el sueño normales. Si el gato aparece en la situación anterior, se considera que está fuera del estro y el gato necesita ser suplementado con nutrientes a tiempo para ayudar a fortalecer la condición física del cuerpo, lo que favorece el desarrollo normal del cuerpo.
1. Estado mental
Durante el celo, los gatos están más excitados yactivos y están más ansiosos. Durante el día o la noche, pueden gritar durante mucho tiempo. Si la gata está en celo, la finalización del amor hará que el estado mental se vuelva tranquilo y silencioso, permitiendo que la propia situación vuelva a la normalidad.
2. Apetito
Durante el estro, afectará a la alimentación normal, provocando falta de apetito e incluso negativa a comer. Si el apetito de la gata vuelve a la normalidad significa que ha pasado el periodo de celo y es una gata. Fenómeno normal.
3. Comportamiento
El comportamiento de los gatos en celo es relativamente anormal. Rodarán, frotarán, provocarán y realizarán otras acciones, lo que indica que están en celo. A través de las acciones anteriores, el gato macho puede observar que si los comportamientos anteriores vuelven a la normalidad, significa que el período de estro ha terminado.
4. Aspecto
Si es un gato macho, el pene puede agrandarse durante el periodo de celo. Las gatas pueden tener hinchazón perineal, sangrado anormal y otros síntomas. Si el período de celo ha pasado, la aplicación anteriorLa apariencia volverá a la normalidad.
Una vez pasado el periodo de celo de la gata, es necesario observar el estado físico de la gata en cualquier momento. Si el gato parece apático y débil, y no le gusta comer, puede tratarse de una enfermedad física. Se recomienda que el dueño se lleve al gato a tiempo. Vaya a un hospital habitual para recibir tratamiento.
